¡¡¡Pierdo y gano!!!

Siento no haber podido escribir antes... pero el miércoles tengo dos horas de teatro y encima tenía un examen el jueves y ayer se me pasó la tarde muy rápido y no me acordé (lo siento, lo siento, lo siento).
Hoy os voy a contar que pasó el miércoles:
Los miércoles acabamos a las 12:50, mucha gente se dirigió hacia el salón de actos (donde se hacía la entrega de premios), se montaron una presentación increíble, las sillas con el nombre de los concursantes (por suerte me tocó al lado de dos amigas un curso más adelantado al mío), hasta hubo presentadores, entre premio y premio contaban algo en otro idioma (Alemán, Árabe, etc...)...
Para empezar dieron el premio de un concurso que habían hecho tan solo los de mi curso (solo somos dos clases) y por pura chiripa lo gané yo (lo juro, el primer premio que he ganado en toda mi vida), ese concurso trataba de que te enseñaban libros, cómics, etc. que había en el instituto, luego te daban unas preguntas y tenías que elegir la respuesta correcta, al parecer fui la que más acerté de todo el curso. Gané un libro, una libreta y un punto de libro muy bonito.
Pero no gané nada más, pero después de eso fue un alivio tremendo, me había puesto tan nerviosa que me costaba respirar.
Ahora estoy contenta, pero me he dado cuenta que me conoce medio instituto, los profesores me saludan por los pasillos, los alumnos me señalan ( y yo que quería ser alguien normal...) por lo visto he destacado por lo joven que soy y por los jardines que me meto (suspiro).
Bueno, ¿qué sé le hará? yo ya sabía que entraría pisando fuerte y que participaría por todo.
He llegado a pelearme con el tutor porque ha nadie le gustaba su método de enseñanza y como en primaria destaqué por saber hablar y convencer, un compañero se lo cuenta echando las culpas a mí y tuve que explicarle mis razones y como le iría mejor para enseñar y me hizo caso (ahora el tutor quiere que trabaje de profesora y mis compañeros de política), tuve que hablar ante un jurado en una ambientación de aula...
Muchas cosas. Espero, mejor dicho: deseo que no me llamen ni para dar un discurso ni nada por el estilo.
Ciao.